Una figura alada, que plácidamente descansa sobre una esfera. Su postura nos sugiere que es dueño de sí mismo, que sabe dominar sus impulsos, que actúa con serenidad y reflexión, sumado a ello el equilibrio del cuerpo nos genera estabilidad, tranquilidad y capacidad de meditación, estos elementos permiten alcanzar ecuanimidad, el espíritu, el cuerpo son la misma esencia por lo tanto es indivisible.
Encontramos en esta pieza la unión de 3 elementos importantes que se presentan a lo largo de la exposición, el antifaz, el gorro de aviador y las alas, que en conjunto dotan de una fuerza al cuerpo. En espera de emprender el vuelo y perseguir la tan deseada libertad.